Venezuela.
Desde este lunes, creyentes católicos se mantiene en vigilia en la iglesia San Miguel, en Ejido, Mérida, luego de que descubrieran lágrimas de sangre en el rostro de una imagen de la Rosa Mística que recientemente fue traída en peregrinación desde San Cristóbal, Táchira.
José Antonio Becerra, una de las personas que trajo la virgen hasta Ejido, aseguró que las lágrimas comenzaron a brotarle desde el 2001. Asegura que cada vez que “algo malo” ocurre, la estatua de la Rosa Mística llora con mayor abundancia.
Recientemente también había derramado lágrimas, durante el terremoto de Italia, explicó el fervoroso cristiano, quien considera que la sangre que emana de esta Rosa Mística es una manifestación de Dios. “La Virgen quiere decirnos algo”, explicó.
Fuente:panorama.com.ve
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